¿Coincide tu personalidad emprendedora con tu idea de negocio?

¿Sabías que existen diferentes tipo de personalidades empresariales? Por principio, la palabra empresario proviene de una palabra francesa “entreprendre” que significa emprender. Si quieres ser más analítico y hablas francés, podrías pensar que proviene de la combinación de dos verbos entre y prendre. Entrer significa “entrar” y prendre significa “tomar”. La combinación de ambos significaría “entrar para tomar”. Estonces, quien ingresa a los mercados para aprovechar las oportunidades de ganancias asumiendo los riesgos es, por definición, un emprendedor.

Veamos algunos datos interesantes sobre los empresarios:

Las personas que se convierten en emprendedores buscan una vida empresarial o caen en ella. No todos los que se convierten en empresarios crecieron pensando que su sueño era convertirse en propietarios de negocios.

Las personalidades del empresario

Los emprendedores se dividen en diferentes tipos de personalidades emprendedoras: profesional, experto o pragmático, e inventor. Tal vez como propietario de una pequeña empresa, no has pensado demasiado en el tipo de emprendedor que eres. Estabas demasiado ocupado concentrándote en hacer que tu negocio funcione y sea rentable, y no tanto en el tipo de emprendedor que eres.

Profesionales

Aquellos emprendedores que se conocen como emprendedores profesionales comienzan un negocio, y otro, y otro. Son muy buenos para establecer un negocio y hacerlo muy exitoso en un período de tiempo relativamente corto. A veces, si la suerte lo tuviera, el primer negocio funciona bien y lo venden. Pronto comienzan otro negocio porque ahora ser emprendedor está en su sangre y no pueden ir a trabajar para otra persona.

Expertos

¿Pensaste que cada persona que se convierte en emprendedor se propuso serlo? A veces, un emprendedor busca a alguien que sea experto en un campo distinto, pero que necesita para su negocio, como contabilidad, finanzas, marketing o ventas. También puede ser que necesiten un experto en una industria en específico, como salud, productos farmacéuticos o cosméticos. Luego buscan a alguien que tenga ese conocimiento y les piden que se unan a su empresa haciéndolos socios. ¡Voila! Ahora son emprendedores.

Los emprendedores expertos a menudo están bien educados y tienen experiencia en su oficio trabajando en un entorno corporativo durante varios años. Allí perfeccionan sus habilidades creando la experiencia que los hace tan valiosos como emprendedores.

Inventores

El tercer tipo es el inventor. Monthly Bill Gates es un empresario tipo inventor que ha hecho que este tipo sea muy conocido. Este tipo de emprendedor puede tener la clásica personalidad de inventor. Usted conoce al “profesor despistado” que se ve tan atrapado en su tecnología e invención que no funcionan bien en un entorno empresarial totalmente funcional. Como resultado, no pueden funcionar como líderes de una empresa porque tienen un enfoque demasiado limitado.

En cambio, para convertirse en un éxito como emprendedor, compensan sus defectos rodeándose de expertos que pueden proporcionar la experiencia comercial que les falta. De hecho, pueden contratar al emprendedor “profesional” como socio para centrarse en los aspectos de crecimiento de la empresa, y ellos puedan continuar en la capacidad de inventor, que es lo que mejor hacen.

Combinando personalidades

Hay mezclas de estos tres tipos de emprendedores. Es posible encontrar un tipo de inventor-profesional que tenga la suerte de tener ambas habilidades a su disposición. Pueden convertirse en genios súper creativos, que pueden inventar y comenzar negocios y lo hacen extremadamente bien; se vuelven muy rentables aprovechando al máximo su potencial creativo y comercial. ¡Pueden convertirse en multimillonarios!

El emprendedor pragmático-profesional requiere una combinación de expertos que también entienda el funcionamiento de un negocio. Utilizan su experiencia para desarrollar un plan para un negocio que conducirá a una noción comercial muy rentable y se dedicará a contratar todo el talento que necesitan en cada área para que sea extremadamente exitoso. Por ejemplo, a alguien que conoce muy bien el negocio farmacéutico se le ocurre una idea para comercializar y administrar productos farmacéuticos de una manera nueva y más eficiente. Su experiencia como emprendedor profesional le permitirá profundizar y ayudar con el proceso de inicio del negocio mientras supervisa el desarrollo del fin farmacéutico.

Otro hecho interesante es que ciertos tipos de personalidades empresariales van mejor con tipos específicos de negocios. Aumenta tus posibilidades de éxito si eliges un negocio que coincida con tu tipo empresarial. A menudo, cuando estás pensando en comenzar un negocio, no piensas en qué tipo de emprendedor eres. El éxito a menudo depende de que conozcas tus propias fortalezas y debilidades, y de tu capacidad para encontrar personas que lo complementen.

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